Hace unas semanas, el ministro Montoro metió (otra vez) la pata al decir en las Cortes que los salarios españoles no estaban bajando, sino subiendo muy poco. La respuesta ha parecido un concurso: a ver quién demuestra antes y mejor cuánto han bajado los salarios.
En general, las respuestas al Sr. Montoro se han centrado en dos aspectos de la bajada de sueldos: el salario nominal y el salario real. En términos muy generales, parece que se está produciendo una congelación o un pequeño descenso de los salarios nominales; añadiendo el efecto de la inflación, parece que se está produciendo una reducción moderada de los salarios reales.